Nuestros productos de pasteleria son una de las cosas que màs extraña un argentino cuando vive en el exterior. Sobre todo a la hora de preparnos un buen mate, nuestra bebida tradicional por excelencia, que nos sigue alli por donde vamos.
Con la globalizacion en èstos ùltimos años encontrar la yerba mate, con la que nos hacemos esta famosa infusiòn, no es un problema.
Pero la nostalgia pega fuerte cuando buscamos con que acompañarlo.
Si bien en cada pais que nos acoge, hay siempre cosas ricas con que tomarlo, es inevitable que nuestros recuerdos (y papilas!) nos remonten a los viejos socios del mate.
Mi equipo de mate viajò conmigo cuando me vine a Italia, no creo que exista un argentino capaz de olvidarlo, cualquier cosa se le podria escapar , menos su mate!
Y para poner remedio a eventuales “ataques de nostalgia” me asegurè de traer conmigo recetas de dulces tipicos argentinos .
Y no podian ser otros que los de Blanca Cotta! Porque son una garantia.
Pero la nostalgia pega fuerte cuando buscamos con que acompañarlo.
Si bien en cada pais que nos acoge, hay siempre cosas ricas con que tomarlo, es inevitable que nuestros recuerdos (y papilas!) nos remonten a los viejos socios del mate.
Mi equipo de mate viajò conmigo cuando me vine a Italia, no creo que exista un argentino capaz de olvidarlo, cualquier cosa se le podria escapar , menos su mate!
Y para poner remedio a eventuales “ataques de nostalgia” me asegurè de traer conmigo recetas de dulces tipicos argentinos .
Y no podian ser otros que los de Blanca Cotta! Porque son una garantia.
Aqui no hay manera de “salvar las papas” saliendo a correr a una panaderia si la cosa apremia. Hay que volverse autosuficiente, y para ello es necesario un buen maestro.
Los ataques llegaron ( y como!) Pero por suerte estaba Blanca , quien atravès de sus escritos, como si fuera una abuela con la que hablàs por telefono para pedirle una receta, ha colmado mis momentos de añoranza.
Como siempre en poquitas lineas logra explicarte lo simple que puede ser, como en este caso , hacerte unas ricas facturas.
Los argentinos llamamos facturas a una variedad de dulces elaborados con una masa que lleva levadura.
Esta receta la tomè de un cuaderno que heredè de mi abuela, donde no solo tomaba apuntes sino que tambien recortaba y pegaba articulos de periodicos con muchisimas recetas, y casi todas se imaginan a quien pertenecen? Pues a nuestra adorada Blanca!
Los ataques llegaron ( y como!) Pero por suerte estaba Blanca , quien atravès de sus escritos, como si fuera una abuela con la que hablàs por telefono para pedirle una receta, ha colmado mis momentos de añoranza.
Como siempre en poquitas lineas logra explicarte lo simple que puede ser, como en este caso , hacerte unas ricas facturas.
Los argentinos llamamos facturas a una variedad de dulces elaborados con una masa que lleva levadura.
Esta receta la tomè de un cuaderno que heredè de mi abuela, donde no solo tomaba apuntes sino que tambien recortaba y pegaba articulos de periodicos con muchisimas recetas, y casi todas se imaginan a quien pertenecen? Pues a nuestra adorada Blanca!
El recorte no tiene fecha pero segun mis calculos debe ser de treinta años atràs , cuando Blanca tenia una pequeña secciòn de cocina en el nuestro reconocido diario El Clarin.
Y sucediò que en un bonito dia de otoño , decidimos ir con una pareja de amigos italo-argentinos a tomar mates a un parque. Y para que fuera bien especial, mi hija y yo , pusimos manos a la obra:
Ingredientes: ( yo hice la mitad de èstas medidas y salen unas 30 facturas gorditas )
100 gramos de levadura de cerveza
2 tazas de leche tibia
1 y ½ taza de azùcar ( tazas
tamaño desayuno)
100 gr. de margarina blanca ( yo usè manteca – mantequilla)
5 huevos
La ralladura de 1 limòn
1 kg. Y un poquito màs de harina.
2 tazas de leche tibia
1 y ½ taza de azùcar ( tazas
tamaño desayuno)
100 gr. de margarina blanca ( yo usè manteca – mantequilla)
5 huevos
La ralladura de 1 limòn
1 kg. Y un poquito màs de harina.
“Disuelva 100 gramos de levadura de cerveza en 2 tazas de leche tibia y, batiendo con la mano bien abierta, agrèguele todo esto: 1 y ½ taza de azùcar (cuando hablo de tazas siempre me refiero a las de tamaño desayuno), 100 gramos de margarina blanda ( hay de las untables uenìsimas), la ralladura de 1 limòn, 5 huevos y aproximadamente 1 y un poquito màs de harina. Cuanta màs? Hasta que la masa de desprende del bol, y usted pueda volcarla en la mesa y castigarla hasta que se vuelva tierna y elàstica. Listo? Pòngala en un bol, pintela con margarina derretida tàpela y dèjela en un sitio tibio, hasta que duplique su volumen.
Y nada mas. Haga despuès con ella lo que quiera: roscas simples, roscas trenzadas, pancitos de la salud, medialunas…UNICA RECOMENDACION: dejar levar la masa, nuevamente y untar con huevo y azùcar antes de cocinarla en horno requetecaliente. Y una ventaja: si de pronto se cansa de estar en la cocina meta la masa en una bolsa de polietileno, guardela en la heladera… y acuèrdese de ella cualquier otro dia de la semana!”
Para quien no haya hecho antes medialunas aquì va una ayuda:
Entienden ahora cuando digo “con poquitas lineas”.
Parece increible que sea tan simple lograr unas facturas exquisitas, todo merito de Blanca!
Entienden ahora cuando digo “con poquitas lineas”.
Parece increible que sea tan simple lograr unas facturas exquisitas, todo merito de Blanca!
La tarde en el parque fue un èxito, con mates y facturas surtidas: medialunas rellenas- èsta vez con Nutella pero no se olviden de nuestro maravilloso dulce de leche!-, espirales y pancitos con trocitos de chocolate . Y mi hija contaba feliz de como las habia hecho ella misma, que era super cierto , una prueba màs de lo fàciles que son de hacer.